
El estado de Hidalgo se posicionó entre las entidades con mejores prácticas en el manejo del gasto público federalizado, al no registrar ni una sola observación económica en la primera entrega del informe de la Cuenta Pública 2024, presentada por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) el pasado 30 de junio.
De acuerdo con el reporte, a nivel nacional se revisaron más de 9 mil millones de pesos, y en el caso específico de Hidalgo, se fiscalizaron 7 mil 439 millones de pesos, equivalentes al 99% de los recursos federales ejercidos en tres fondos clave: el Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM), enfocado en infraestructura educativa y asistencia social; el Fondo de Aportaciones para la Educación Tecnológica y de Adultos (FAETA); y las Participaciones Federales, que se distribuyen entre los 84 municipios de la entidad.
El resultado fue contundente: cero pesos observados por uso indebido. Esto coloca a Hidalgo dentro de un grupo reducido de entidades federativas con finanzas completamente claras y transparentes, lo que ha sido motivo de reconocimiento nacional.
Este logro se atribuye a la política de orden, honradez y eficiencia impulsada por el gobernador Julio Menchaca Salazar, quien desde el inicio de su administración estableció que el dinero público no sería objeto de corrupción ni uso político, sino una herramienta para mejorar la vida de la gente.
La Secretaría de la Contraloría del Estado tuvo un papel fundamental en el proceso, brindando asesoría técnica y realizando revisiones internas preventivas que aseguraron el cumplimiento legal y financiero. Gracias a esta labor, incluso se logró recuperar de forma anticipada casi un millón de pesos, correspondientes a pagos indebidos: 66 mil pesos entregados a familiares de personas fallecidas y 933 mil pesos a personal sin el perfil adecuado en el sector educativo. Esta acción se llevó a cabo sin requerimiento de la ASF, demostrando capacidad de reacción y control interno.
Aunque se detectaron tres observaciones administrativas menores, estas no implican afectación económica y ya están siendo atendidas por las instancias responsables, reafirmando el compromiso con la rendición de cuentas y el combate a la corrupción.
“En Hidalgo, cada peso tiene destino y propósito: servir al pueblo, no servirse de él”, expresó el gobernador Menchaca, quien refrendó su compromiso con un gobierno que actúa con responsabilidad y transparencia.
El resultado del informe confirma que sí es posible gobernar con honestidad, y que Hidalgo avanza con paso firme hacia una administración pública eficiente, confiable y comprometida con la transformación del estado.